No siempre lo comparto todo y no siempre tengo ocasión de compartir cuando quiero, a veces el trabajo manda y otras veces la falta de tiempo físico y las prioridades son quienes me lo impiden. Lo que sí tenía claro es que debía mostrar, si o sí, algunas de las imágenes pertenecientes a la boda de Irene y Jorge. Una celebración de las que a mi me gustan, ubicada en exteriores, con una maravillosa luz natural y con la buena energía y compañía de los allí presentes.
A las afueras de la ciudad y en un precioso espacio perteneciente al Real Club Sevilla Golf la pareja reafirmó, frente a su familia y amigos de toda la vida, el amor que sienten el uno por el otro. Todo en una ceremonia repleta de anécdotas y con mucho sentido del humor que transcurrió al cobijo de un árbol centenario.
Boda llena de detalles de principio a fin y en la que ambos contrayentes se preocuparon de que todos y cada uno de los invitados disfrutasen y participasen de cada momento tanto como ellos. Trucos de magia, bailes grupales, sorpresas varias y un montón de fotos, de las cuales como no, te dejo por aquí una pequeña muestra para que te hagas al menos una idea de a qué me refiero.
Agradecida siempre por la confianza que me dan las parejas con las que coincido en el camino y agradecida, por supuesto, de que hayas llegado aquí y me hayas leído.
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